Felicidad para la Real Academia Española (2019) es el “estado de grata satisfacción espiritual y física”, así como también “persona situación, objeto o conjunto de ellos que contribuyen a hacer feliz”. En 2011 el primer ministro de Bután propuso a las Naciones Unidas el “Día Mundial de la Felicidad” lo que atrajo la atención de la felicidad como “medida”. Cuando buscas en internet los países más felices del mundo encuentras a los más desarollados y con mayor calidad de vida; paradójicamente se trata un estado que va más allá de la acumulación de bienes y objetos materiales..
Repasemos brevemente; cuando te sientes a gusto contigo mismo, con lo que haces, sueñas y vives, al ayudar a otros, el poder disfrutar de los alimentos que te encantan o la naturaleza que te rodea; todo ese conjunto de situaciones hace que te sientas feliz.
La felicidad no es la meta de llegada ni tampoco plantearse objetivos como “cuando me gradúe, seré feliz” o “cuando encuentre una pareja”, no; por el contrario, es disfrutar el viaje, es la actitud que asumes ante la vida y las circunstancias que se avecinan; en otras palabras, es un estado que yace en nuestro interior. Muchas personas sufren profundas decepciones al poner su felicidad en función de otras, prácticamente invisibilizándose e ignorando sus propias necesidades e interess.
En todo caso no es más que una decisión personal cuando asumes las consecuencias de tus acciones y omisiones; al actuar responsablemente contigo mismo y con los demás; al comprometerte con las actividades que te agradan. Zygmunt Bauman plantea que los seres humanos esconden su insatisfacción personal aumentando los niveles de consumo; sin embargo esto no significa que alcances altos niveles de felicidad ni calidad de vida. Tampoco es vivir sin dificultades ni obstáculos; la felicidad viene de la satisfación personal por superar o resolver problemas con tu mejor esfuerzo.
¿Has reflexionado cómo ha sido tu actitud durante el trayecto de vida?